La foto de Cairo, elocuente: acudimos todos en masa |
Da para todo, todos lo llaman, todos lo quieren para su programa, sobre todo porque, cuando aparece, marca puntos, el minuto a minuto en la tele es, para decirlo de alguna manera, el marca pasos de un infartado, tiene que estar siempre activo, siempre atento.
Este miércoles, en los salones de ATILRA, estuvimos todo o casi todos: varios móviles en la puerta -Crónica, América, C5N, etcétera- y una multitud ansiosa esperando en la puerta. Hubo de todo: un ex boxeador aprovechó para pedir jubilación digna para los boxeadores argentinos y pedirle apoyo a Maravilla -de hecho, no le preguntó si en el exterior hay jubilación para los boxeadores, pero no importa-, también firmó apoyo a los niños deportistas, le preguntaron si iría a Bailando por un sueño, se pelearon en larguísima fila para sacarse, apenas, una foto. Algunos de nuestros colegas festejaron sus chistes a carcajada limpia, sonoramente -un mal pensado acotó que, tal vez, sea para quedar bien con el campeón... hay cada uno...-, y todos (algunos periodistas incluidos) se sacaron fotos con él. Sergio da para todos. Quien esto escribe también tiene que hacer "la nota", no vayan a creer. Sergio es de todos, para todos, no puede faltar en ningún canal ni ningún programa, tiene que acordarse de todos aquellos que alguna vez lo saludaron, tiene que estar siempre alegre, dispuesto, preparado y ocurrente.
No faltarán los que digan "Yo le hacía notas cuando no era nadie" y una sarta de pavadas más, todos quieren algo de él, una sonrisa, un chiste, una nota breve, cualquier cosa, un pibe nos dice que existe un blog exclusivo para él y quiere que escribamos un comentario cuando pelee, una chica nos muestra una remera para que la firme, y así y así...
Finalmente, huimos mientras él se quedaba ahí, firmando y firmando, disfrutando merecidamente de este momento de gloria, de fama y hasta de adulación. Está bien, es humano, tiene derecho a disfrutar de esto, sobre todo porque es parte de ser boxeador el tener Ego y orgullo de sí mismo.
Mientras tanto, lo seguirán convocando de cuanto programa haya en el aire, porque al cabo, cuando él aparece, también crece el rating.
El temita acá es por qué cada vez que está en el país todos se pelean por tenerlo, y cuando pelea nadie habla sobre él ni mira sus combates. En fin...
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