POR QUE GANA MAYWEATHER



UN FLOYD LEGÍTIMO: ANTE TODO EL DINERO


 GANA MAYWEATHER. Y gana porque es más veloz, mental y físicamente; porque posee un talento único, tal vez porque lleve el boxeo en la sangre y un radar en la cabeza. Y eso que no somos, justamente, fanáticos de su estilo. Para nada, porque también a veces es demasiado mezquino, o demasiado sobrador, o simplemente, demasiado...
Cuando tuvo que noquear a un Ricky Hatton, lo hizo con todo su talento. ¿Qué puede ofrecer Víctor Ortiz? Es un hombre de ataque, es un hombre de pegada, viene de hacer un gran combate ante Andre Berto y viene también, aunque ya pasó un tiempo, de recibir tremenda paliza a manos de Marcos Maidana - quien, dicho sea de paso - también anduvo visitando la lona esa noche. Ortiz, que sigue siendo uno de los niños mimados de Golden Boy, pagó caro el enfrentamiento con El Chino. Era, se entiende, el favorito, pero terminó mirando al rincón, suplicando que se terminara el martirio. Es por eso que se fue reconstruyendo una carrera que aparecía como brillante. Y es por eso que se llega a la instancia de éste sábado, instancia que será transmitida para la Argentina y casi toda Latinoamérica, por Combate Space, con los relatos de Juan Abrahma Larena, a partir de las 21 horas.
Claro que nadie es invencible, y  Ortiz tendrá chances si logra meter la mano: el muchacho deberá presionar desde el vamos, tratar de ponerlo contra las sogas a Floyd y no dejarlo armar. Es un boxeador de ataque y  debe hacer lo que sabe, sin pedir grandes cambios. Floyd regalará algunos asaltos hasta que le tome la mano. Ortiz se la jugará, seguramente, hasta el último aliento. No se extrañen que Floyd, si tiene ganas, puede definir antes. Y teniendo en cuenta que ama al dinero por sobre todas las cosas, a lo mejor una buena oferta nos permite verlo frente a Manny Pacquiao en el futuro. Sería bárbaro, porque Floyd dice que es el mejor de todos. Y los mejores de todos son los que pelean con todos. Aunque sea, que lo haga por la plata, a la que no solamente ama, sino de la que presume todo el tiempo...