BENICIO SOSA fue un excelente peso gallo, que en Buenos Aires era pupilo de Héctor Callegari. Fue uno de los argentinos que viajó a México, en 1974, para actuar en la velada en la que Mantequilla Nápoles noqueó a Horacio Saldaño.
La foto, justamente, fue obtenida en el Gran Hotel Ciudad de México, en donde también estuvieron para asistir a ese festival, Carlos Monzón, Ringo Bonavena y Víctor Emilio Galíndez. Estuvimos charlando mucho, ya que era un gran dialogador. En mi caso, comenté la velada por Radio Splendid con los relatos de RICARDO ARIAS.
CHAQUEÑO DE VILLA ANGELA, lo llamaban "Kid Gallito" y bien puede decirse que peleó con todos, como Sergio Palma, Juan Domingo Malvarez, César Villarruel o Hipólito Núñez. Fue campeón argentino de peso gallo tras ganarle al cordobés José Casas en 1973, tras haber intentado la corona de los pesos moscas ante el pampeano Osvaldo Maldonado, ante quien perdió por puntos en 1971. Según Boxrec, ganó 61 peleas, con 28 KO a favor y perdió 16. Combatió como rentado entre 1969 y 1981, y formó parte de aquel inolvidable gimnasio del Luna Park, plagado de figuras.
BENICIO SEGUNDO SOSA, ese es su nombre y apellido completo, fue un peleador generoso, de raza, que siempre dio tremendos espectáculos ganando o perdiendo. En aquella noche mexicana, fue uno de los pocos en lograr la victoria, tras noquear técnicamente a Martín Corona, en el fastuoso Palacio de los Deportes del D.F.
Trabajaba en un negocio de la calle Corrientes, cerca de Libertad. Cuando ganó el campeonato argentino, un breve grupo de amigos lo llevó a cenar y a festejar justamente en Corrientes y Libertad. El tuvo la deferencia de invitarme a participar de esa noche con ellos, y de aquella cena, y de aquel gesto -como de otros- me queda el recuerdo no solamente de un tremendo peleador, sino de una bella persona, un amigo de la vida...
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