GANÓ EL MAS FUERTE

Bronca: Cotto no perdonó a Margarito

ACLARACION necesaria. Antes de la pelea, cuando entre un grupo de amigos se hizo la clásica encuesta, este cronista votó por Cotto antes del límite. ¿Es necesaria la aclaración? Si. Sentimos que el puertorriqueño le iba a ganar a Margarito contundentemente. Pero no tal como se dieron las cosas este sábado en el Madison.
Creíamos que el mexicano llegaba al ring más deteriorado que Cotto: aquella tremenda paliza que recibió ante Pacquiao iba a ser un serio lastre para él, incluyendo sus problemas oculares. De hecho, la Comisión Atlética de Nueva York agregó a un especialista en ojos para el control del combate.
Lo cierto es que, desde el comienzo, Miguel Cotto mostró un estilo movedizo, con salidas a los costados y muchos jabs. Parecía que Margarito estaba lento física y mentalmente. Le llegaban todos los golpes y, encima, no podía achicar espacios (mérito de Cotto).
Sin embargo y a partir del cuarto, la pelea cambió. El mexicano salió a meter manos y metió, por cierto, muy buenos directos ante un Cotto que perdió velocidad y movimientos.
No hay dudas de que Cotto fue mejor. No hay dudas de que la pelea fue muy bien parada, ya que el mexicano tenía totalmente cerrado el ojo derecho: el referí, Steve Smoger, no tenía otra salida a pesar de los ruegos del los mexicanos.
Pero queda en pie que Margarito es un peleador de raza, que es capaz de superar (casi) todas las dificultades. Cotto ganó por más fuerte, porque tuvo un buen plan de pelea, porque torturó al mexicano con sus izquierdas. Pero en ningún momento lo tuvo sentido y en cambio, más de una vez, debió retroceder ante la enjundia y el coraje de Margarito.
Cotto confesó que está resentido con su rival y ni lo saludó. Nadie olvida las malas artes que ha utilizado Margarito: una mancha que no se podrá borrar jamás y que empaña profundamente la carrera de un campeón de casta y un peleador de raza, de esos que cada día vienen menos.
En una pelea de semifondo, Sebastián Luján perdió por puntos ante el invicto Mike Jones: fue, por cierto, una labor para el olvido, porque el rosarino se limitó a bajar los brazos y a provocar, olvidándose de que las peleas se ganan conectando manos.
Por último: se llegó a decir que el ganador podría enfrentar a Maravilla Martínez. Si esto se hiciera realidad, cosa que no nos parece fácil, será un combate totalmente favorable al argentino. Es que, por si no le hemos dejado en claro, Cotto se movió muy bien e hizo una buena pelea, pero ya no es el mismo. Hace rato que dejó de serlo...